Elena Araque es navegante, científica y amante del mar y la naturaleza. Estudió químicas en la universidad y después de dedicarse durante varios años a la vida académica, decidió dar un gran giro en su vida y dedicarse a lo que verdaderamente le gusta, el mar y el mundo náutico.

Actualmente, a bordo de su casa y velero “Ciencia” y bajo la marca “Elena Oceánide”, realiza navegaciones y promueve expediciones relacionadas con el estudio y el cuidado del entorno marino. Entre sus nuevos proyectos se encuentra “OceanLab” (Laboratorio Oceanográfico a vela), que trata de combinar la navegación a vela con la investigación científica, el desarrollo tecnológico y de producto marino, náutico y ecológico.

Agradecemos de antemano a Elena que comparta sus experiencias y nuevos proyectos con nuestros lectores en esta interesante entrevista.

Elena, ¿cuándo y como comienza tu relación con el mar?

Desde pequeña fui nadadora de Natación Sincronizada y gracias a ello tuve la oportunidad de trabajar en delfinarios y tener mi primer contacto directo con la vida marina, y así descubrí el buceo que fue lo que despertó mi pasión por el mar. Tras terminar la tesis doctoral en química decidí dejar Madrid y mudarme a la costa para ser instructora de buceo.

En esa época conocí el mundo de la náutica y la posibilidad de vivir en velero navegando por el mundo y fue entonces cuando encontré mi camino en la vida. Navegar en mi velero por el mundo y contribuir a su conservación mediante la investigación científica.

¿Qué te motivó para realizar el gran cambio de vida y volcarte en el mar?¿Ha sido fácil?

El motivo fue la busqueda de un sentido a la vida. Yo vivía dejándome llevar por la corriente, pero realmente no era feliz, por otra parte el mar me hacía sentir viva y me abrió muchas puertas, además me hizo ver la vida de otra manera que para mí tenía más sentido que lo que siempre nos ha mostrado la sociedad y el sistema.

No ha sido nada fácil, porque todo cambio de vida conlleva un sacrificio y dar muchos palos de ciego. Superar muchos muros, principalmente a nivel personal. Estos últimos 10 años desde que cambié de vida no han sido solo un camino de aprendizaje profesional, marino y náutico, si no también a nivel personal; de hecho, esto ha sido lo más difícil e importante, ya que es algo que no se enseña en la escuela y no tuve la oportunidad de aprenderlo de pequeña.

Pero sinceramente, ahora que tengo las riendas de mi vida y yo dicto mi rumbo, me doy cuenta de que este camino de crecimiento personal y autoconocimiento es algo esencial en la vida y lo que hace que vivir sea tan bonito. Además ahora pienso que ojalá se hablara de todo esto más en general en la sociedad y hubiera más herramientas que nos dieran desde pequeños, porque la gente sería mucho más feliz y viviría más en paz.

¿Cómo surge “Elena Oceánide” y  cuales son sus objetivos?

Elegí el nombre «Elena Océanide» porque resume de forma simbólica mi historia y mi vínculo profundo con el agua. Desde niña, el agua dulce fue mi mundo debido a la natación sincronizada y con el tiempo, mi camino me llevó al mar.

Las «Océanides», en la mitología griega, son ninfas hijas del titán «Océano» y de «Tetis», y representan a todas las formas del agua: ríos, manantiales, pero también el mar. Me identifiqué con esa imagen de espíritu acuático, que nace en las aguas dulces y encuentra su destino en el océano.

Así que por tanto, es un nombre que honra mi historia, mi presente como navegante y también mi compromiso con la naturaleza.

¿Puedes contar a nuestros lectores cómo es el velero “Ciencia” en el que realizáis las navegaciones?

Pues «Ciencia» es un precioso velero modelo «Grand Soleil 46.3» construido en el prestigioso astillero Cantiere del Pardo, en Italia a finales de 2002. Tiene 14 metros de eslora y 4.40 m de manga, con un calado de 2.2 m.

Tiene 3 camarotes dobles y 2 baños completos con ducha de agua caliente. Un amplio sofa con mesa donde podemos estar hasta 10 personas y que también se convierte en cama y sala de cine. Tenemos una cocina con 2 fuegos y un horno a gas, y también una nevera y un congelador.

La bañera es amplia y con un gran timón, al ser un barco oceánico está bien resguardada, por lo que es segura en alta mar. Tenemos placas solares para cargar las baterías, y una desalinizadora de agua para ser lo más autosuficientes posible.

Además disponemos de un dinghy (embarcación auxiliar) con motor, para poder explorar en sitios de poca profundidad. Nos facilita el poder vivir fondeados y bajar a tierra cuando sea necesario.

¡Es una maravilla de casa flotante!

¿En qué consiste el proyecto “OceanLab” y qué oportunidades ofrece a la comunidad científica?

«OceanLab» es un proyecto que combina tanto mi carrera profesional científica como la marítima. El nombre «Ciencia» del barco lo puse con el objetivo de que llegara a ser un laboratorio oceanográfico a vela, de manera que mientras navegamos conociendo el mundo en velero podemos ir contribuyendo a la investigación oceanográfica. Colaborando con instituciones científicas ya sea recogiendo muestras, datos o haciendo expediciones más concretas con científicos a bordo.

Por otro lado, también colaboramos con empresas tecnológicas y de I+D a las que les ofrecemos el barco como plataforma para probar sus productos en condiciones reales de navegación. Empresas que crean y desarrollen equipos para investigación, para la navegación, productos y materiales para barcos, para la vida a bordo y productos más ecológicos y sostenibles para reducir el impacto humano en la naturaleza.

Y además, abro las puertas de mi casa para ofrecer la oportunidad de unirse a estas expediciones a las personas que estén interesadas en experimentar esta forma de vida y contribuir a la conservación de los oceános. Colaborando podemos crear más proyectos y alianzas para seguir cuidando este maravilloso y esencial ecosistema.

¿Qué expediciones o navegaciones tienes previstas este año con el velero”Ciencia”?

Ahora mismo estamos en Lanzarote, y el día 1 de mayo zarpamos para Madeira donde vamos a estar todo el mes de mayo. Para este mes tenemos 3 expediciones de una semana cada una (se puede ver toda la info en la web (https://elenaoceanide.com/expediciones/) y en junio pondremos rumbo a las Islas Azores donde estaremos hasta finales de agosto.

De ahí iremos al sur de la península porque quiero hacer algunas mejoras en el barco, volveremos a Canarias para una colaboración en un proyecto de investigación de tiburones y, si todo sale bien: ¡en Enero nos gustaría cruzar el Océano Atlántico!

¿Cómo organizáis la vida a bordo del “Ciencia” en sus navegaciones, cuál es la rutina?

Pues depende de si hacemos travesías más largas o más costeras y de las personas que vengan a bordo y su experiencia. En las travesías más largas hacemos guardias de 3-4 horas y me gusta que haya siempre 2 personas en la bañera de manera que uno va en guardia y la otra le hace compañía por seguridad, y también para que se haga más ameno y evitar cabezaditas.

En cuanto a la comida, normalmente nos encargamos mi pareja que es cocinero (y mecánico) y yo. Solemos preparar cosas antes de las travesías largas por si es incómodo cuando estemos navegando y que sea todo más sencillo.

Por lo demás, vamos pendientes de posibles avistamientos de vida marina, especialmente si hay que hacer muestreos a determinadas horas, grabar para futuros proyectos audiovisuales, etc.

Y siempre que se puede y la meteo lo permite, hacemos algún juego o cosas que amenicen las horas. Eso ya es algo que surge según las preferencias y la forma de ser de la tripulación que vaya a bordo en la travesía. Pero a mí me gusta mucho la música y hacer cosas para que nos riamos un rato. ¡Fuera vergüenzas!

Para finalizar Elena, ¿algún otro proyecto que tengas por la proa para los próximos años y quieras adelantar a nuestros lectores?

Pues hay muchas cosas que quiero hacer la verdad. Lo más cercano va a ser lanzar mi canal de Youtube, algo que llevo años queriendo hacer y en lo que ya estoy trabajando también.

Quiero llegar a crear mis propios proyectos científicos, y algo que me hace mucha ilusión es darle vida a un concepto y marca que he creado que se llama «OceanFulness», que va encaminado a la parte de crecimiento personal que comentaba al principio de esta entrevista, con la que poder ayudar a personas en procesos de desarrollo personal y autoconocimiento de sanación de traumas o heridas, pero siempre ligado al mar y a la navegación que es algo que a mí me ha ayudado mucho a crecer y a salir del hoyo. Por eso siempre digo que “el mar me salvó la vida”.

Puedes obtener más información en los siguientes enlaces:

Web: www.elenaoceanide.com

Instagram Elena Oceánide: https://www.instagram.com/elena_oceanide/

Facebook Elena Oceánide: https://www.facebook.com/ElenaOceanide

Instagram OceanLab: https://www.instagram.com/oceanlab_ciencia/

Facebook OceanLab: https://www.facebook.com/OceanLabCiencia/

YouTube (próximamente): https://www.youtube.com/@ElenaOceanide

Desde «Navegantes Oceánicos» damos la enhorabuena a Elena por su apasionate proyecto y le agradecemos su colaboración con esta entrevista.

¡Mucha suerte y buenas navegaciones y exploraciones!.